Los dálmatas han sido populares durante cientos de años. Mucha gente se plantea adquirir un dálmata cada año. Una de las mayores dudas que surgen con respecto a un dálmata es si es bueno o no con los gatos. Hay un gran número de personas y hogares que intentan integrar perros y gatos en una misma casa. A veces esto puede ser un problema y otras veces los gatos y los perros se llevan bien. Entonces, ¿cómo les va a los dálmatas?
Los dálmatas están clasificados como en su mayoría amigables con los gatos. Muchos dálmatas no tienen ningún problema con los gatos. Siempre existe la posibilidad de que a tu dálmata en particular no le gusten los gatos, pero la mayoría de las veces, las personas tienen muy pocos problemas. Esto es lo que necesita saber sobre la integración de un gato y un dálmata, incluido cómo presentarlos, las señales a las que debe prestar atención y si los dálmatas se llevan bien con otros animales.

Los dálmatas suelen ser buenos con los gatos
Puede resultar sorprendente saber que los dálmatas son muy buenos con los gatos la mayor parte del tiempo. Hay muchos propietarios de dálmatas que tienen dálmatas y gatos viviendo en armonía bajo el mismo techo. Una vez que un dálmata conoce adecuadamente a un gato, normalmente conviven bien con él. Una de las razones por las que los dálmatas se llevan bien con los gatos es que no fueron criados para cazar animales pequeños como lo eran algunos perros. Eso significa que los dálmatas tienen un impulso de presa relativamente bajo. Los gatos no vuelven locos a los dálmatas como lo hacen con algunas razas.

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perros caniche
Algunos dálmatas no se llevan bien con los gatos
Hay excepciones a cada regla. No todos los dálmatas se llevan bien con los gatos. Esto puede deberse a varios factores, incluidos los antecedentes del dálmata, la personalidad del gato y la personalidad del dálmata. Así como hay algunos pitbulls que pueden llegar a ser súper mimosos con los gatos, habrá algunos dálmatas que no tolerarán los gatos en su casa.
El problema es que es difícil saber cómo reaccionará un dálmata al vivir con un gato hasta que se ve obligado a hacerlo. Muchos dálmatas se adaptan después de un breve período de transición, pero algunos simplemente no lo hacen. Presentar adecuadamente a sus animales, observar sus comportamientos y evaluarlos es clave para determinar si su dálmata será una buena opción a largo plazo para usted y su gato.
Las cosas a las que hay que prestar atención incluyen signos de agresión como gruñidos, mordiscos y posturas. También querrás ver si tu dálmata tiene ganas de perseguir a tu gato y cómo interactúa tu gato con el dálmata. Algunos gatos son instigadores que no dejan en paz a los perros, lo que puede agravar los problemas.
Cómo presentar a tu dálmata y a tu gato
Presentar a tu dálmata y a tu gato es una parte crucial del proceso de integrarlos en una misma casa. Hay una serie de pasos que puede seguir para asegurarse de que la introducción se realice sin problemas. El período introductorio puede durar desde un par de días hasta un par de semanas. El objetivo es que tanto tu dálmata como tu gato sepan que el otro animal está presente y que ambos llegaron para quedarse.
A continuación se incluyen algunos pasos, consejos y trucos que puede utilizar para presentar a su dálmata y a su gato y tener la mejor oportunidad de que se lleven bien.
- Asegúrate de que tu dálmata conozca órdenes básicas como sentarse, quedarse quieto y salir.
- Proporcione espacios individuales tanto para su dálmata como para su gato. Permita que cada uno pueda retirarse a su espacio seguro cuando lo necesite.
- Mantenga a los animales separados durante unos días e introdúzcalos lentamente. Es posible que desees considerar mantener a tu dálmata con correa cuando lo presentes gradualmente o dejarlo en su jaula y traer al gato.
- Cree presentaciones seguras durante un período de unos pocos días. Premia a cada animal después de cada sesión; es decir, dale un premio a tu gato o dale a tu perro una afirmación positiva.
- Cuando se sienta cómodo, suelte a su perro durante estas sesiones y comience a dejar que los dos animales compartan espacios comunes. Esté atento a cualquier signo de comportamiento preocupante.
- Modifique y ajuste según sea necesario.
- ¡Ten paciencia y tómate tu tiempo!
Muchas veces, los gatos simplemente desaparecerán y se esconderán de su dálmata hasta que esté listo para salir y comenzar a interactuar. Algunos gatos se mantendrán naturalmente separados de su dálmata todo el tiempo y reducirán la posibilidad de reacciones negativas o situaciones peligrosas.

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¿Para qué se criaron originalmente los dálmatas?
La historia del dálmata es un poco turbia. Los dálmatas aparecieron en escena en la época medieval, pero no fueron criados para ningún propósito en particular. A diferencia de otros perros, los dálmatas han tenido distintos trabajos a lo largo de su historia. Los dálmatas fueron uno de los primeros perros de transporte fiables, o perros que viajaban en carruajes tirados por caballos y alertaban al conductor del peligro. Esto ha hecho que el dálmata se sienta muy cómodo con los caballos.
Después de eso, los dálmatas fueron utilizados en una variedad de roles diferentes, incluso como artistas, perros de exhibición, perros de búsqueda y rescate y como mascotas. Algunos perros fueron criados para cazar un animal muy específico o fueron criados para rastrear animales pequeños, lo que los hace más difíciles de integrar con animales pequeños como los gatos. Los dálmatas no suelen tener ese problema.
¿Se llevan bien los dálmatas con otros animales además de los gatos?
Sí. Los dálmatas pueden llevarse bien con una variedad de animales, incluidos los gatos. Los dálmatas suelen llevarse muy bien con otros perros. Se llevan muy bien con los humanos. También se sienten muy cómodos con los caballos, lo que no se puede decir de todas las razas de perros. La historia reproductiva única del dálmata los hace muy versátiles con una serie de seres vivos que pueden convertirlos en compañeros perfectos para hogares con múltiples mascotas o animales.

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Pensamientos finales
La buena noticia para las personas que están pensando en adquirir un dálmata es que, en general, son buenos con los gatos. La mayoría de las veces, si un dálmata se siente cómodo en un hogar, no debería tener problemas para vivir junto a un felino. Sin embargo, no todos los dálmatas son tan complacientes. Cada perro es diferente. La clave es presentar a tu dálmata y a tu gato y estar atento a cualquier señal preocupante que pueda hacerte saber que la pareja no será una buena combinación.
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